La ciudad con dos caras
Nicosia ha sido la capital de Chipre durante unos 1.000 años. Situada en el centro de la isla, está flanqueada al norte por la cordillera de Kyrenia con la llamativa montaña Pentadaktylos. El nombre turco de la ciudad, Lefkosia, probablemente esté relacionado con los altos álamos (en griego: "Izquierda") que una vez adornaron la ciudad. Además, Nicosia es la sede del gobierno, la sede de las misiones diplomáticas y un centro cultural. Nicosia no es solo un centro comercial, sino también un centro económico de la isla. La ciudad tiene un gran centro de convenciones de última generación y numerosas galerías de arte.
La ciudad tiene dos caras: el casco antiguo, rodeado por las murallas venecianas del siglo XVI, por un lado, y la ciudad moderna, con una población total de 16 habitantes, por el otro.
Dentro de las murallas, que protegieron la ciudad durante siglos, hay numerosos lugares de importancia histórica. El casco antiguo tiene un estilo especial. Magníficas iglesias, casas cuidadosamente renovadas y negocios de artesanías reflejan la atmósfera mágica de los viejos tiempos y aparentemente transportan al espectador a otra época.
Otro edificio restaurado también es impresionante: la Puerta de Famagusta, que ahora es un centro cultural. Las concurridas calles comerciales de Ledra y Onassagorou dominan las murallas de la ciudad. Al final de la carretera se encuentra la Línea Verde, la línea de demarcación que aún divide la isla de Chipre.
La plaza Eleftheria, ubicada en el centro, une la antigua y la nueva Nicosia. El palacio presidencial es un notable ejemplo de arquitectura colonial. La antigua sede del gobernador británico está ubicada en una colina, rodeada por un extenso parque. La puerta de entrada todavía está adornada con el escudo de armas británico.